Santiago de Chile, 7 jul (EFE).- Las reservas hoteleras en la Isla de Pascua están copadas con motivo de uno de los eclipses solares totales más esperados de la historia, dijeron hoy a Efe las autoridades de ese territorio chileno insular.
El domingo 11 de julio, se calcula que unas 4.000 personas entre turistas e investigadores, se reunirán en la isla chilena del Pacífico para contemplar cómo la luna se interpone entre la Tierra y el Sol y el día se convierte repentinamente en noche durante algo más de cinco minutos.
Un fenómeno que no ocurría desde hacía 11 años, en julio de 1991, en el Pacífico sur.
En el "ombligo del mundo", como llaman sus habitantes a la isla, hace más de 1000 años no se apreciaba un suceso semejante, por lo que en opinión de los isleños, el fenómeno supone una verdadera "muerte" del Sol, seguida de un renacer, claro está.
No sólo los que se encuentren en esta isla podrán contemplar este fenómeno.
La sombra que proyectará la luna se desplazará unos 3.700 kilómetros por el Pacífico hacia el este, lo que permitirá que gran parte de Chile, Perú y Argentina puedan disfrutar del espectáculo natural, previsto para las 14.04 hora local. (16.04 en Chile continental y 20.04 GMT). - Por Agencia EFE
En la Biblia se declara que el Sol y la Luna no solamente fueron creados para adornar los cielos, sino que también para varios propósitos:
14 Y Dios pasó a decir: “Llegue a haber lumbreras en la expansión de los cielos para hacer una división entre el día y la noche; y tienen que servir de señales y para estaciones y para días y años. 15 Y tienen que servir de lumbreras en la expansión de los cielos para brillar sobre la tierra”. Y llegó a ser así. 16 Y Dios procedió a hacer las dos grandes lumbreras, la lumbrera mayor para dominar el día y la lumbrera menor para dominar la noche, y también las estrellas.- Gén. 1:14-16
Aparte de ser marcadores del día y la noche, éstas "lumbreras" (el Sol y la Luna), sirven para las "estaciones, días y años". Pero además se les asigna el propósito de servir como "señales". Ésto no quiere decir como malamente dice la astrología que los cuerpos celestes influyen en sucesos de la Tierra, sino más bien que avisan que ciertos sucesos estarían por ocurrir. Las "señales" serían marcadores del reloj astronómico sincronizado con el reloj profético de Dios.
"También, habrá señales en el sol y en la luna"- Lucas 21:25. Esto sin duda alcanzará un punto más alto en la gran tribulación, no obstante, el Sol y la Luna ya podrían estar dando señales previas más leves como marcadores del tiempo profético.
Recordemos que antes de la guerra de Rusia y Georgia el 2008, ocurrió un eclipse total de Sol. Por lo tanto, el evento astronómico del cuál se habla ahora en la prensa, podría estar indicando que se acerca una guerra. No es casualidad que la prensa ya esté alertando sobre un inminente conflicto en Medio Oriente.