miércoles, 28 de abril de 2010

El día que el mundo se detuvo


“Di a Zorobabel el gobernador de Judá: ‘Voy a mecer los cielos y la tierra. Y ciertamente derribaré el trono de reinos y aniquilaré la fuerza de los reinos de las naciones"-Ageo 2:21,22

Según el calendario lunar, las Torres Gemelas fueron derrumbadas el 23/24 de Elul de 2001. Elul es el sexto mes del año judío. Si retrocedemos 2520 años hacia el pasado tendríamos que llegar al 24 de Elul de 520 a.e.c. ¿Qué sucedió ese día?

Y Jehová procedió a despertar el espíritu de Zorobabel hijo de Sealtiel, el gobernador de Judá, y el espíritu de Josué hijo de Jehozadaq el sumo sacerdote, y el espíritu de todos los restantes del pueblo; y ellos empezaron a entrar y a hacer la obra en la casa de Jehová de los ejércitos su Dios. Fue el día veinticuatro del sexto mes, en el segundo año de Darío el rey. (Ageo 1:14, 15.)

La edificación del Templo comenzó en 537 a.EC. Luego los judíos la abandonaron y la reemprendieron en 520 a.E.C y la terminaron en 515 a.E.C. Pero debido a las implicaciones proféticas (relación con la “corona” profética hacia Cristo y el "derribar el trono de reinos y aniquilar la fuerza de los reinos de las naciones’. (Ageo 2:21, 22.) de los libros de Zacarias y Ageo, el año 520 a.E.C es clave.

El Libro Paraíso Restaurado (de los Testigos de Jehová) capítulo 2 comenta:“En el año segundo de Darío el rey, en el mes sexto, en el día primero del mes, la palabra de Jehová les ocurrió por medio de Ageo el profeta a Zorobabel hijo de Sealtiel, el gobernador de Judá, y a Josué hijo de Josadac el sumo sacerdote, diciendo.”—Ageo 1:1.El sexto mes de ese año contaría desde la primavera de 520 a. de la E.C., y sería el mes lunar de Ageo conocido como Elul. (Nehemías 6:15) Ese mes lunar correspondería con agosto-septiembre para nosotros. Según la ley teocrática dada por medio del profeta Moisés, aquel día de la luna nueva era un día en el cual tocar las trompetas sagradas en relación con los sacrificios que se ofrecían a Jehová Dios en aquel día. (Números 10:10) Además, se hacían ofrendas especiales por fuego a Jehová. (Números 28:11-15) También surgió la costumbre de hacer visitas religiosas en ese día al lugar donde estaba el altar de Jehová. (2 Reyes 4:23) Eso atraía a muchas personas devotas a Jerusalén. Por lo tanto el profeta Ageo debe haber tenido una muchedumbre más grande de lo acostumbrado a la cual dirigir la “palabra de Jehová” en aquel día del 1 de Elul de 520 a. de la E.C. Sin duda Ageo estaba en Jerusalén en aquel día, porque su palabra profética fue dirigida al gobernador Zorobabel y al sumo sacerdote Josué, quienes oficiaban en Jerusalén. El mensaje de Ageo afectaba a toda la nación y merecía ser escuchado.” (Fuente de la información: Paraíso restaurado capítulo 2)

El día 1 de Elul debe haber correspondido al 20 de agosto. 24 días más tarde, los judíos ya se sienten motivados y comienzan la obra de Edificación del nuevo templo sin interrupción. Esto correspondería al 11 de septiembre para nosotros. Y se cumple la palabra de Ageo 1:14,15

El libro Paraíso vuelve a comentar:

“Darío Histaspes aparece en el registro bíblico en particular con relación a la reconstrucción del templo de Jerusalén. El fundamento del templo se colocó en 536 a. E.C., pero la obra de reconstrucción se prohibió en 522 a. E.C. y “continuó detenida hasta el segundo año del reinado de Darío” (520 a. E.C.). (Esd 4:4, 5, 24.) Durante ese año, los profetas Ageo y Zacarías animaron a los judíos a reanudar la construcción, y el trabajo volvió a emprenderse. (Esd 5:1, 2; Ag 1:1, 14, 15; Zac 1:1.)”. (pág 635,636)

"Cuándo se escribió. Los cuatro mensajes registrados por Ageo se pronunciaron en Jerusalén en el segundo año del rey persa Darío Histaspes (520 a. E.C.), durante un período de unos cuatro meses. Según parece, el libro se acabó de escribir en el año 520 a. E.C. (Ag 1:1; 2:1, 10, 20.) Durante el tiempo en que Ageo profetizó, lo hizo también Zacarías, y con el mismo propósito. (Esd 5:1, 2; 6:14.)" (pág 66).

La Obra Perspicacia dice:
“Los judíos habían abandonado la construcción del templo y se habían dedicado a otros menesteres, de modo que Jehová envió a sus profetas Ageo y Zacarías en el segundo año de Darío I (520 a. E.C.) a fin de animarlos a continuar, y luego se promulgó un decreto para que se respetase la orden original de Ciro y en el que se mandaba que se suministrara dinero de la tesorería real para sufragar las necesidades de los constructores y los sacerdotes. (Esd 5:1, 2; 6:1-12.)” (pág. 1099).

El Libro Toda Escritura comenta:

Finalmente, en 522 a.E.C., aquellos opositores no judíos lograron que se proclamara una prohibición oficial de la obra. Fue en el segundo año de la gobernación del rey persa Darío Histaspes, es decir, en 520 a.E.C., cuando Ageo empezó a profetizar, y esto animó a los judíos a reanudar la construcción del templo. Ante aquello, los gobernadores vecinos enviaron a Darío una carta en la que pedían un fallo sobre este asunto; Darío restableció el decreto de Ciro y se puso de parte de los judíos y en contra de los enemigos de estos. (Ageo).

"Ageo muestra que habrá un mecer para ‘derribar el trono de reinos y aniquilar la fuerza de los reinos de las naciones’. (Ageo 2:21, 22.) Al citar la profecía, Pablo habla, por contraste, del Reino de Dios “que no puede ser sacudido”. (Toda Escritura Ageo)

Así que la fecha de 520 a.E.C no es especulativa ni antojadiza. Es apoyada por las publicaciones y por la cronología de la Sociedad. De lo contrario, esto significaría desbaratar toda la cronología de la Organización e incluso 1914 debería verse afectado. Por lo tanto 2001 si estaría señalado en las Escrituras incluso con el día preciso. Lo que sucedió ese día y sus implicancias no podemos negarlas. El 11 de septiembre de 2001 el mundo cambió para siempre. Algo solo comparable a 1914.

La profecia de los 7 tiempos (2520 años) es aplicada a la nación de Israel y a Jerusalén cuando fué destruída en 607 a.E.C. Si sumamos 2520 años llegamos a 1914 (si el lector usa calculadora agregue un año, ya que no existe realmente el año cero). Ese año Jesús empezó su segunda presencia y los últimos días de este sistema. Ahora bien, en la aplicación directa de Daniel (si usted lee el capítulo 4 lo comprobará) , los 7 tiempos estarían aplicados a la dinastía de los reyes Babilonios y la ciudad de Babilonia de la cual Nabucodonosor II se jacta en el capitulo 4 de Daniel. Al final de Daniel 4 se dice que el asunto es para que se "sepa que el altisimo es el gobernante" y puede humillar a las potencias o reyes orgullosos. Ese es el contexto principal de la profecía de Daniel 4.

Babilonia fué conquistada en 539 a.E.C por Ciro. No obstante, los medopersas no la destruyeron. Posteriormente y como comenta la Obra Perspicacia y el libro Ayuda "En dos ocasiones se rebeló contra el emperador persa Darío I Histaspes, y en la segunda de ellas fue demolida (arrasada)" Finalmente la destrucción de la ciudad terminó hacia el 520 a.EC (El Paraíso restaurado a la humanidad... ¡por la Teocracia!). Aunque la volvieron a reconstruir en periodos posteriores, nunca más la ciudad volvió a ser lo mismo, y finalmente fué deshabitada.

En 520 como muestran las publicaciones cristianas (véase Obra Perspicacia) Jehová envió a sus profetas Ageo y Zacarías en el segundo año de Darío I (520 a. E.C.) a fin de animar al pueblo a continuar la reedificación del templo de Jerusalén (que había sido abandonado).

Por lo que el gobernador Zorobabel y sus colaboradores hicieron aquel día (24 de Kislev, 520 a. de la E.C.) en el fundamento del templo en Jerusalén fue algo profético.

Sí, ciertamente, Jesús el Mesías fue prefigurado tanto por el sumo sacerdote Josué como por el gobernador Zorobabel. El sexto mes de ese año contaría desde la primavera de 520 a. de la E.C., y sería el mes lunar de Ageo conocido como Elul. (Nehemías 6:15) Ese mes lunar correspondería con agosto-septiembre para nosotros.

Ahora fue apropiado que Zacarías colocara la corona de oro sobre la cabeza del sumo sacerdote Josué “Tiene que sentarse y gobernar en su trono, y tiene que llegar a ser sacerdote sobre su trono.” (Zacarías 6:13). -Paraíso Resturado

Este acto simbolizó a Jesús como rey. Téngase presente que estamos hablando de la reanudación de las actividades del templo, y no la inaguración de éste. Pero el simbolismo e importancia y relación directa con Cristo y la mecedura sobre los reinos es evidente.

Estos sucesos ocurridos al comenzar septiembre de 520 a. E.C son prefiguraciones proféticas del reinado de Jesús. Y las publicaciones cristianas avalan esto. Ahora bien, si sumamos 7 tiempos o 2520 años desde septiembre de 520 a.E.C llegamos a septiembre de 2001. Y en esos primeros días de septiembre, el mundo se trastornó nuevamente a nivel global.

Si 1914 significó el principio de los últimos días, 2001 es el inicio de la parte final de los últimos días. Y es curioso que la profecía de Zacarias habla del poder real del Mesías. Al "mecerse" ese dia a la primera potencia mundial orgullosa (Estados Unidos), quedó claro que ninguna potencia es invulnerable y que el Reino de Dios pronto acabaría con los reinos humanos quizás dentro de una década más tarde.


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