Cierto manifiesto reciente de origen "extraterrestre" dice:
"Se ha canalizado a ciertos guías que se avisará que las multitudes deben congregarse (ver dibujo lateral) en determinados puntos de reunión fuera de algunas zonas urbanas. Unos dos o tres días antes de que ocurra serán avisados. Serán evacuados a través de pequeñas naves lanzaderas

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Cierto informe sobre algunos planes políticos dice lo siguiente:
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"El gobierno de EE.UU. fue avisa

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Cierto manifiesto evangélico dice:
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"Debemos salir de las ciudades, a salir de Babilonia e ir los campos, las montañas y valles para esperar el arrebatamiento del Señor, tal como judíos se fueron a las montañas de Pela en el primer siglo y salvaron su vida de la destrucción. Ya hay hermanos que están organizando grupos crísticos para estar en comunidades y esperar el Rapto. La nación de Israel fué de esa forma sacada en grupo de Egipto".
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Todos éstas ideas que empiezan a circular en Iglesias, grupos de Contacto Ovni, y fuentes Militares tienen "algo" en común: Esperan y buscan la salvación en la forma de estar reunidos como grupo y esperar en determinado lugar (preferentemente fuera de las ciudades) la llegada del Rescate, sea en la forma de Cristo, Ovnis o Líderes globales. De ésta forma, Satanás tendrá atrapados en éstas ideas a tres grupos del sistema cuando comience a observar que la Gran Tribulación está inclinando la balanza hacia Jehová y su Sistema esté a punto de ser destruido.
Los tres grupos son:
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1- Adherentes de las ideas de la Nueva y creyentes en extraterrestres salvadores "angelicales".
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2- Remanentes y escasos sobrevivientes

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3- Escépticos, políticos y militares que prefieran los refugios del gobierno o alguna combinación con la venida de los extraterrestres.
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Claramente nuestro señor Jesús sabía de la confusión que se iba a generar una vez empezada la Gran Tribulación. Él nos dejó todo claro y su palabra debemos obedecerla, aún cuando no coincida con otra orden que podamos recibir:
"Porque entonces habrá gran tribulación como la cual no ha sucedido una desde el principio del mundo hasta ahora, no, ni volverá a suceder. De hecho, a menos que se acortaran aquellos días, ninguna carne se salvaría; mas por causa de los escogidos aquellos días serán acortados. ”Entonces si alguien les dice: ‘¡Miren! Aquí está el Cristo’, o: ‘¡Allá!’, no lo crean. Porque se levantarán falsos Cristos y falsos profetas y darán grandes señales y prodigios para extraviar, si fuera posible, hasta a los escogidos. ¡Miren! Les he avisado de antemano. Por eso, si les dicen: ‘¡Miren! Está en el desierto’, no salgan; ‘¡Miren! Está en los aposentos interiores’, no lo crean. Porque así como el relámpago sale de las partes orientales y resplandece hasta las partes occidentales, así será la presencia del Hijo del hombre". -Mateo 24: 21-27
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Creo que éstas palabras e instrucciones de Jesús para la Gran Tribulación son demoledoras y rotundas. No dependeremos del lugar físico para sobrevivir. Es un error creer que huir a los cerros, campos y lugares fuera de la ciudad nos salvará. Y aquí discrepo con muchos que aún creen que habrá que evacuar las ciudades y salir en grupos o reunirse en los salones del Reino a esperar el Armagedón. Y aquí es dónde seremos probados al límite. Nuestra naturaleza humana nos clamará por sobrevivir físicamente, pero ciertamente si hacemos eso no habrá ninguna diferencia con los políticos, contactados y remanentes religiosos que buscaran "lugares" para sobrevivir. Seremos engañados.
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Y aquí es donde habrá una piedra de choque. Atención, probablemente en esos días aparecerán "instrucciones" que digan que hay que evacuar, o puede que algún miembro impulsivo y que desee liderazgo y vea que los ancianos han sido detenidos o están desaparecidos, creerá que ha llegado su momento de actuar y dirá que hay que ir a tal o cual parte.
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¿Qué haremos ante la orden clara de Jesús y que sale en la Biblia? ¿Qué sucederá en su caso si escucha que es una orden de los ungidos y de la sucursal (si es que hay todavía) de su país? ¿A quién obedeceremos al final?
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Esa es nuestra prueba final. "Les he avisado de antemano", nos dijo Jesús.